La muerte de tu pareja genera una serie de emociones mentales y físicas que te dejan sintiéndote agotada. Entre muchas de ellas están el cansancio mental, la ansiedad, las intensas olas de tristeza, la falta de orientación, sentirte perdida, y la carga de los quehaceres diarios, hijos y trabajo.
Confía en tu cuerpo y escucha cuando la desconexión se hace necesaria. Nuestro cerebro se protege del dolor que se genera con la pérdida a través de la desconexión, lo hace como mecanismo de protección, todo esto es normal.
Es por eso que el autocuidado se convierte en una parte vital para navegar tu duelo.
Te invito a que pienses en ti, empieza a nutrir tu mente, tu espíritu y tu cuerpo. Es importante que te hidrates lo suficiente, comas alimentos que te sacien y que sean adecuados para tu salud, establezcas rutina de sueño, delegues quehaceres en tu hogar y separes tiempo para no ejecutar ninguna tarea.
También, te invito en lo posible a ir al gimnasio, hacer zumba, yoga u otros ejercicios que te permitan mover tu cuerpo para mantener este balance entre tu misma y la experiencia de tu duelo.
Adicionalmente, te invito a que escribas sobre tus pensamientos, a que leas sobre el duelo, a que te distraigas y aprendas algo nuevo ya que no existe una única forma de navegar tu dolor y no tienes que pasar las 24 horas del día pensando en la pérdida.
Busca otras viudas para que te conectes, te inspires y aprendas de este viaje del que no hemos sido preparadas y del que no tienes que experimentar aislada.
Todo empieza en ti, cultiva tu relación contigo misma y así podrás ayudar a los que te rodean.
¿Qué podrías sacar del vaso vacío?
Con amor,
Una madre viuda
Pd: si te encuentras navegando un duelo, tienes clara la teoría y tienes dificultad con la “práctica”de cómo experimentar el duelo de manera saludable, te invito a que participes en una sesión de coaching.
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