Después de perder a mi esposo y experimentar un mar de emociones, decidí aprender acerca del duelo. Compre algunos libros, investigué en internet, compré literatura para niños, vi videos en Youtube, me uní a varios grupos en facebook, etc., con el ánimo de entender y “superar” lo que me estaba pasando y, hasta este momento: ¡la emoción no ha desaparecido!
Honestamente, ya no me interesa “superarla” porque ahora pienso que NO hay nada que superar. Hoy en día agradezco enormemente la posibilidad de utilizar mi experiencia y conocimiento para compartir con ustedes mi aprendizaje sobre la vida misma.
Hace muchos años, la investigadora Elizabeth Kubler-Ross y el investigador David Kessler desarrollaron una teoría sobre el duelo. Concluyeron que el duelo tiene unas etapas: la ira, la negación, la negociación, la aceptación, el aprendizaje. De acuerdo con lo que leí y mi propia experiencia, muchos hemos malinterpretado la teoría porque pensamos que al experimentar las etapas, todo queda superado.
Es más creí que era TIEMPO lo que se necesitaba.
No es cierto!
Aquí estoy, pronto serán tres años desde la partida de mi esposo, y aun tengo momentos en los que experimentó algunas etapas. He aprendido que el duelo no es lineal, es decir no tiene un comienzo y un final. Simplemente estas etapas ocurren en cualquier momento de nuestra vida. Es más, algunas personas deciden quedarse en ciertas etapas la mayor parte del tiempo, otras nunca las experimentan todas.
No está mal, cada quien decide.
Las etapas del duelo surgen como respuesta a la pérdida: no solo la pérdida de un ser querido, sino también a un divorcio, la pérdida de un empleo, el fin de una relación, etc . Son una base para que sepamos donde estamos emocionalmente y para entender nuestra propia vida frente a la circunstancia de lo que ya no esta.
El duelo es subjetivo, depende de cada persona. Y cada persona vive el duelo de manera diferente. Lo que sí puedo decir es que el duelo es una emoción, que hace parte de la “experiencia humana”. Así que todos experimentamos duelo alguna vez en la vida.
Mi invitación es a la auto-observación y la autorreflexión. No estás solx. Yo he pasado por eso, y en mi caso, me siento más fuerte al compartir mi historia, que al esconderme en ella. No tienes que quedarte en una de estas etapas, simplemente ser consciente de que estás experimentando una de ellas.
Pd: El coaching es una herramienta que te permitirá experimentar esas emociones y aprender a moverte más rápido y seguro en tu mismo duelo. Agenda una consulta.
!te lo aseguro!